Cuando comenzó el atardecer del miércoles, la cólera por la muerte de Nahel, un joven de 17 años ejecutado de un balazo el martes cuando no se detuvo ante un control policial porque no tenía carnet de conductor en Nanterre, se extiende en Francia.

Desde su suburbio parisino al oeste de la ciudad -a donde llegó un ministro del gobierno a presentar las condolencias a su familia- a Lille y Toulousse, donde hubo incendios de autos, de basureros y de buses en los barrios populares. Pero también la tensión llegó a Lyon, Bordeaux, St Etienne y Marsella.

Más de 2000 policías se han desplegado, con gases lacrimógenos y grupos anti disturbios para frenar la violencia. Pero en Nanterre, Dijon, Virry Chatillon en Essone y en el barrio popular Mirail de Toulouse había en la noche de este miércoles barricadas, enfrentamientos con la policía, incendios de ómnibus y de autos.

Incendios y ataques a la policía

La marcha blanca o “de revuelta” de la familia se postergó hasta el miércoles a las dos de la tarde en Nanterre. La población está furiosa por la muerte de un joven, que muchos conocían como un “delivery” de pizza y vivía solo con su abuela y su madre, sin el menor inconveniente.

El ministro de la Ciudad, Olivier Klein, visitó a la madre en nombre del gobierno para saludarla y expresar su solidaridad.

En el distrito de Mirail de Toulouse, un centenar de personas lanzaron proyectiles contra la policía el miércoles por la noche y un vehículo ligero fue incendiado. En Lille, un centenar de manifestantes también se concentraron frente a la prefectura contra los “crímenes policiales”.

Alrededor de las 20 (hora local) estaba en marcha una acción, según una fuente policial, que dejó “un vehículo incendiado”. Nanterre comenzó a tener serios incidentes cerca de la medianoche.

El portavoz de la jefatura de policía de París asegura que la violencia urbana sigue siendo “esporádica”.

El ministro del Interior, Gérald Darmanin, anunció la movilización para la noche de 2.000 policías y gendarmes en París y en sus suburbios interiores, 800 más que en la noche del martes.

Loubna Atta, portavoz de la jefatura de policía de París, precisa que la operación afecta a toda la región parisina, con un “foco” en Hauts-de-Seine y en particular en Nanterre. El objetivo es evitar alteraciones del orden público, que por el momento se mantienen “contenidas”.

“En esta etapa, tenemos algunos episodios de violencia, que son esporádicos, puntuales y todavía muy localizados”, aseguró.

 

Detenidos

Dos paramédicos fueron detenidos bajo custodia policial” por desacato y amenazas en particular” en Nanterre. Fue luego de que en las redes sociales se difundiera un video que mostraba a un paramédico atacando verbalmente a la policía.

Conocía al joven asesinado y lo trasladó en la ambulancia. Los dos paramédicos fueron detenidos “por desacato, amenaza y difusión de información sobre la vida privada de una persona depositaria de la autoridad pública para exponerla a un riesgo de lesiones personales”.

El ambulanciero era conocido del chico muerto y reprochó a los policías la muerte. En un video en las redes, el conductor de la ambulancia, muy enojado, se dirige a la policía y menciona la muerte de Nahel en Nanterre “por falta de licencia”.

Quién era el chico baleado por un policía

Nahel (17) había alquilado por una aplicación un Mercedes Benz amarillo descapotable AMC, cuando escapó a la orden policial. En los barrios populares, los jóvenes temen los controles policiales y alquilan los automóviles por aplicaciones, que no les exigen documentos.

Lo acompañaban dos amigos: uno escapó y el otro menor fue detenido. Esta desconfianza con la policía se remonta al 2005, cuando toda Francia estalló en la desobediencia civil cuando dos jóvenes se electrocutaron huyendo de la policía en Clichy sous Bois, a 10 minutos de Paris. Es un producto de la eliminación de la policía de proximidad, a la que le puso fin el entonces ministro del Interior Nicolás Sarkozy.

Nahel estaba registrado en la formación de un CAP de electricidad en el liceo y se ganaba la vida como repartidor.

Fue asesinado el martes durante un control de carretera en Nanterre, con un disparo en el corazón, por un tiro mortal de un policía, que desde entonces ha sido detenido.

Según la versión de los miembros de la policía, los agentes se habrían visto obligados a abrir fuego, tras una negativa a cumplir con la orden. Pero un video compartido en redes sociales pone en duda este escenario oficial. El video oficial de la policía aun se desconoce.

Hijo único, Nahel fue criado por su madre en el distrito del Vieux-Pont de Nanterre. El joven estaba matriculado desde 2021 en la escuela secundaria Louis Blériot de Suresnes, en Hauts-de-Seine. Soñaba con ser mecánico. El joven tenía el perfil de un estudiante ausente y recientemente se ganaba la vida como repartidor.

Este “niño de barrio” tenía “ganas de encajar social y profesionalmente, no era un niño que vivía del trafico o disfrutaba de los delitos menores”, confió al parisino Jeff Puech, presidente de un club asociativo donde Nahel jugaba rugby.

Desde el anuncio de su muerte, se han multiplicado homenajes similares. Según sus abogados, Nahel M. era “muy querido” en su barrio. Su abuela Nadia recordó con emoción que tenía “solo 17 años” y pintó el retrato de un “chico amable y bueno”.

En un video compartido en las redes sociales, su madre Mounia reaccionó con dificultad a la noticia.

Los abogados de la familia de Nahel piden un cambio de escenario judicial, alegando que la fiscalía de Nanterre carece de imparcialidad porque la persona detenida es un policía local.

Seguridad y drones

La jefatura de policía autorizó el uso de drones hasta el jueves por la mañana en Nanterre, Aulnay-sous-Bois y Villeneuve-la-Garenne. La jefatura de policía de París emitió una orden autorizando “la captura, grabación y transmisión de imágenes por medio de drones” en Nanterre, al día siguiente de la muerte de Nahel.

El alcalde de Viry-Châtillon, donde se incendió un autobús, indica que la situación ahora es “muy tranquila”.

El alcalde de Nanterre pide “que se haga justicia” para Nahel. Una justicia que desea obtener “por un gran movimiento pacífico”.

“Los grandes movimientos pacíficos son mucho más fuerte que los demás”, añadió el funcionario.

Patrick Jarry, el alcalde de Nanterre, indicó este miércoles a la noche que hay “menos violencia que ayer” en su ciudad, al día siguiente de la muerte de Nahel. La gente permaneció encerrada en sus casas y hubo un fuerte dispositivo policial en las calles.

Los primeros incidentes fuertes fueron en Toulouse y Lille, donde circulan imágenes de incendios en las redes sociales luego que una manifestación degenerara y tiros de mortero. Un humo negro se elevaba hacia el cielo. En Nantes reclaman justicia en una marcha nocturna. Los camarógrafos y fotógrafos tienen miedo de llegar a los barrios populares porque les roban las cámaras.

Las autoridades habían anticipado una segunda noche de violencia urbana, particularmente en Nanterre.

Solidaridad de los futbolistas

Después de la solidaridad de Kylian Mbappé y Jules Koundé el martes, nuevas personalidades del mundo del fútbol siguen indignadas y rindiendo homenaje a Nahel, de 17 años, asesinado a tiros el martes en Nanterre (Altos del Sena) por un policía. Este miércoles por la noche, Aurélien Tchouaméni, centrocampista de la selección de Francia y del Real Madrid, publicó una larga “carta abierta” en las redes sociales.

“Nahel podría haber sido mi hermano pequeño”, comienza. “Y tengo el corazón roto cuando escucho a su madre porque es la voz de mi madre la que escucho”.

“Me gustaría entender por qué durante años mueren jóvenes durante controles policiales que parecen triviales”, continuó.

“Comprender por qué el desencadenante parece mucho más ligero cuando se trata de cierto tipo de personas. Entiendan por qué tenía que salir un video para que no se encubriera el caso”, concluyó el jugador.